Título: Neimhaim. Los hijos de la nieve y la tormenta
Autor: Aranzazu Serrano
Editorial: Fantascy
Páginas: 864
Precio: 21.90€
Puntuación
Lo que ahora os contaré es tan cierto como que el fuego quema y el hielo, también.
Sabed, amigos míos, que dos pueblos, dos grandes clanes, habitaban una tierra apartada del resto del mundo. Se creían tan diferentes como la noche lo es del día, y en verdad, os lo aseguro, lo eran.
Amante del coraje y de las armas era el clan Kranyal; guerreros de bravo corazón y maestría en el arte de la lucha. Protectores de la vida y la serenidad eran los Djendel, pacíficos sacerdotes bendecidos con habilidades que iban más allá de lo natural, cuyo uso restringían con estrictos códigos.
Sus historias discurrían por separado, pero un día la frágil armonía quedó alterada y el entramado del destino cambió para siempre. Ambos pueblos salvaron sus recelos y unieron sus caminos por la fuerza de la necesidad. Juntos fundaron un joven reino llamado Neimhaim. Largo y quebradizo sería el camino de su unión; para allanarlo, sus líderes pactaron ceder el mando a sus hijos primogénitos, quienes regirían Neimhaim como esposa y esposo. No podían imaginar que, lejos de allí, un dios desterrado urdía pacientemente un plan para hacer de esos niños un instrumento de venganza contra sus iguales.
Sabed, amigos míos, que dos pueblos, dos grandes clanes, habitaban una tierra apartada del resto del mundo. Se creían tan diferentes como la noche lo es del día, y en verdad, os lo aseguro, lo eran.
Amante del coraje y de las armas era el clan Kranyal; guerreros de bravo corazón y maestría en el arte de la lucha. Protectores de la vida y la serenidad eran los Djendel, pacíficos sacerdotes bendecidos con habilidades que iban más allá de lo natural, cuyo uso restringían con estrictos códigos.
Sus historias discurrían por separado, pero un día la frágil armonía quedó alterada y el entramado del destino cambió para siempre. Ambos pueblos salvaron sus recelos y unieron sus caminos por la fuerza de la necesidad. Juntos fundaron un joven reino llamado Neimhaim. Largo y quebradizo sería el camino de su unión; para allanarlo, sus líderes pactaron ceder el mando a sus hijos primogénitos, quienes regirían Neimhaim como esposa y esposo. No podían imaginar que, lejos de allí, un dios desterrado urdía pacientemente un plan para hacer de esos niños un instrumento de venganza contra sus iguales.
Llevaba queriendo leer este
libro desde el mismo momento en que lo traje a mi casa pero debido a su enorme
tamaño lo he ido retrasando hasta que he dicho de aquí no te escapas.
Una tierra dividida en dos,
el clan de los Djendel, pacíficos y sanadores y los Kranyal, los guerreros,
valientes y audaces. Tan distintos y tan iguales. Para hacer a sus clanes más
fuerte frente a amenazas externas, estos clanes deciden unirse y formar una
alianza que viene profetizada. Ailsa, hija del señor de los Kranyal y Shagan,
hijo del primero de los Djendel son los elegidos para llevar a su pueblo a la
paz deseada pero no todo en su camino será fácil. Existirán obstáculos, dioses
enfurecidos, sus propios instintos que les harán dudar de su verdadero destino.
No voy a mentir, el libro me
ha encantado sin embargo le he visto dos problemillas, es muy largo (creo que
con dos libros iguales no me haría falta ir al gimnasio) y la falta de diálogo
que viene acompañada por muchas descripciones, detalladas al milímetro (en ciertos
casos me gustó porque la imagen de la situación y todo quedaba plasmado muy
bien)
Lo que más me ha gustado la
historia y sus personajes.
La historia está muy bien
llevada, aunque en algunos momentos me sentía como en una montaña rusa en la
que se mezclaban los tiempos de acción y calma y aunque creo que las dos cosas
eran necesarias a veces sentía como que la historia avanzaba a un ritmo
vertiginoso y otras que se quedaba estancada.
Y lo que mejor he visto ha
sido la maduración de Ailsa y Saghan. La historia empieza con su nacimiento,
juventud, adolescencia y madurez y el cambio que sufren es inmenso. Como
aprenden a vivir en un mundo rodeado de gentes, cada gente con un sufrimiento
diferente, con historias diferentes y como cada vivencia los ayuda a madurar
conforme pasan las páginas. Me han
gustado estos dos personajes porque a pesar de la esencia que tienen, se
comportan como humanos, tienen sus dudas, sus remordimientos vamos que me han parecido
fantásticos.
Lo bueno que tiene este
libro también es que va sorprendiéndote en cada página ya no solo con los protagonistas, Ailsa y Saghan, sino
también con sus familias y clanes. A pesar de las características que definen a
cada clan, dentro de los mismos encontramos muchas sorpresas que hacen de la
trama más y más interesantes.
Y el final, o querido final,
que me ha dejado con ganas de más, de saber que futuro le espera a Neimhaim,
como las hilanderas van a seguir tejiendo el destino de sus reyes blancos.
Holiwii *-*
ResponderEliminarMe ha llamado mucho este libro y me ha encantado tu forma de escribir y de explicar las cosas.
Gracias y un beso :*
Me gusta mucho.
ResponderEliminarMe gusta mucho.
ResponderEliminarLo estoy leyendo y estoy sufriendo mucho por Saghan y Ailsa (son tan adorables...), quisiera saber si el final va a ser devastador.
ResponderEliminarPD: Vengo de Canción de Hielo y Fuego y voy curtido en el tema de sufrir la crueldad. No pensaba encontrarme algo así en Neimhaim (en dosis muy bajas, si). Lo que me duele es pensar que los Reyes Blancos tengan un fatal final (no quita, que la obra esta bastante bien y eso no hay que olvidarlo).